EDITORIAL: Edición Marzo del 2008
ECUADOR,
globalizado.

Cada vez estamos perdiendo nuestra identidad, la moneda oficial es el dólar de los Estados Unidos de América, compramos sus productos, hechos con nuestra materia prima que nos compran a bajo precio, pero nos venden ya elaborados a precios realmente altos, compramos sus maquinarias y muchísimas cosas más, pero que podemos hacer, aquí no se cuenta con la tecnología de punta que ellos tienen en sus industrias y por lo que el Ecuador no puede competir con los países desarrollados.

Pero eso no quiere decir que no se puede mejorar el producto y ofrecer a la ciudadanía algo bueno. Y que mejor si es nacional.

¿Realmente se ha tomado conciencia del cambio que está ocurriendo en el País?, no solo es un cambio económico, sino también cultural, adoptamos costumbres, vestimenta, comida chatarra y rápida con franquicias internacionales, en esto no existe ninguna clase de control, se encuentra frituras por todo lado, no existe conciencia del tremendo daño que ocasiona a nuestra salud, cada día encontramos más elevado el índice de diabéticos, cardíacos y a nadie le interesa el tiempo de vida de los demás. La música extranjera, que en muchos de los casos no se entiende lo que se está escuchando, pero igual se la compra, ¿Por qué? porque somos un país consumista, nos venden cosas que ni siquiera son necesarias.

Pero si los gobiernos de turno se preocuparan por educar mejor al pueblo, creando conciencia y respeto a nuestras raíces y poniendo la producción nacional por encima de los extranjeros, otra cosa sería el Ecuador.

Este es un trabajo en conjunto, gobierno-industria, el primero dando las facilidades y dotando de tecnología para poder ser competitivos, mientras que la industria, elaborando productos de buena calidad y que brinden la confianza a los ciudadanos para que los adquieran, que no solo piensen en los ingresos que obtendrán en el corto plazo, sino el posicionamiento al que pueden llegar en el largo plazo.

Pero no todo es malo, es así que si queremos comunicarnos con alguien que está al otro lado del Pacífico o del Atlántico, se lo hace en cuestión de segundos, a través de la Internet, que es utilizada cada vez más por las personas que ni pensado tenían poder manejar alguno de estos equipos que existen actualmente en el mundo y son de mucha ayuda.

También tenemos la ayuda internacional que llega a los países más necesitados, por medio de donaciones económicas haciendo uso de las transferencias bancarias y que en cuestión de minutos podemos disponer de dinero en nuestras cuentas enviado por familiares o amigos migrantes, también a los que sufren algún desastre natural, estos son solo algunos puntos en los que se ve la influencia de los países desarrollados.

El futuro está en manos de los jóvenes y solo de ellos depende el adoptar costumbres extranjeras o ser esencia latina, defendiendo nuestras raíces, para así educar en el futuro a los niños con conciencia, anteponiendo lo nacional sobre lo extranjero.

 


Dirección: Cdla. Bellavista MZ 72 V20. Av. Barcelona y J. Perrone G. * Telfs.: 04 4 220 28 05 - 04 4 220 94 05 * mail@oesteinformate.com